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MAURICIO ARIAS: “MI LOGRO MÁS IMPORTANTE ES HABER DEJADO UNA HUELLA EN EL AJEDREZ DE NUESTRO PAÍS”


MAURICIO ARIAS: “MI LOGRO MÁS IMPORTANTE ES HABER DEJADO UNA HUELLA EN EL AJEDREZ DE NUESTRO PAÍS”

“El ajedrez ha hecho mucho por mí, sino fuera por el ajedrez mi vida, estoy seguro, no sería tan buena como es, y por eso estoy muy agradecido”. Así resume el Maestro Internacional costarricense, Mauricio Arias, su paso por el deporte ciencia, al que le ha dedicado más de 28 años de su vida.

Conoció el ajedrez viendo jugar a sus compañeros de colegio, quienes no le quisieron enseñar. Eso despertó en Arias el deseo de aprender un juego que lo cautivó a primera vista y que le pareció maravilloso.

Actualmente está dedicado de lleno a la enseñanza de la disciplina y de vez en cuando compite en diferentes torneos.

Mauricio Arias habló con FCA Costa Rica.com para contar su paso por un deporte que le ha dado muchas cosas y un mundo del que no quiere salir.

¿Cómo se define como ajedrecista?

Es una pregunta un poco amplia. Si se tratase del estilo de juego básicamente soy un jugador de estilo posicional, no demasiado bueno, pero de estilo posicional. Al principio de mi carrera era un jugador de ataque, con el paso de los años esa parte del juego no es algo que busque en mis partidas, pero si se da perfecto. Y si se tratase de dónde encajo, soy un entrenador de ajedrez que todavía compite de vez en cuando, pero estoy más dedicado a la parte de entrenar ajedrez que a competir, que por dicha todavía logro competir con resultados decentes.

¿Cómo se califica como entrenador?

Soy un entrenador que disfruta mucho trabajar con sus alumnos, usualmente he tenido muy buenas relaciones con mis atletas, y siempre he tratado de dar más de lo que se supone tendría que dar, especialmente de mi tiempo. Y las facetas no son iguales, hay una faceta de formador donde se trabaja con niños de escuela y de colegio a los que ayudo a aprender las bases del juego. Hay una escuela en la que estamos dando ajedrez como una materia y ha sido todo un éxito, lo cual me tiene sumamente orgulloso. Y en la faceta de entrenador tengo mucha experiencia con jugadores a nivel competitivo, especialmente de colegio a universidad. De hecho, fui entrenador de la Universidad de Costa Rica durante varios años, fue un proceso muy exitoso. Y a nivel universitario la UCR es el equipo más fuerte del país.

¿Qué es lo que más le apasiona del ajedrez?

Me apasiona el conocimiento, la capacidad de resolver un problema, no tanto por ejemplo problemas de estudio, que no me llama tanto la atención, las posiciones en las que hay que resolver una solución fantástica, me parecen bonitos, pero no me llama la atención, sino más bien la profundidad estratégica que tiene el juego, la riqueza de ideas que tiene, que parece inagotable y siempre se puede aprender más, eso me gusta mucho.

¿Cuántos años acumula en la disciplina?

Más de media vida, mucho más, con seguridad más de 28 años. Mucho tiempo para estar en una sola cosa, pero así es el ajedrez, que no se termina de aprender.

Con qué faceta se queda: ¿jugador o entrenador?

Con ambas, las dos me gustan. En este momento estoy más metido como entrenador, pero las dos me encantan.

Competir siempre me ha gustado mucho y la capacidad de trasmitir conocimientos y ayudar a otros a aprender me gusta mucho.

¿Cómo es combinar ambas facetas para rendir tanto como jugador y entrenador?

Es difícil. Definitivamente trabajar como entrenador afecta su capacidad como entrenador en forma negativa y en algunos aspectos positivos, te ayuda a refrescar ciertos conocimientos, pero no es lo mismo. Y de hecho jugar nos ayuda como entrenadores, te das cuenta de ciertas cosas cuándo compites que puedes aplicar en los conocimientos que trasmites; pero dificulta que puedas concentrarte en la parte competitiva.

¿Qué recuerda de su primera vez con un tablero?

Recuerdo que no podía usarlo, porque mis compañeros de colegio estaban jugando y vi ese juego que me pareció mágico, realmente quería aprender a jugarlo y no me querían enseñar, así que eso de alguna forma hizo que tuviera hambre de querer jugar ajedrez. Esa fue la primera vez que vi el tablero y especialmente que mis compañeros no querían dejarme jugar.

¿Qué proyecta a corto, mediano y largo plazo en las dos facetas?

Por la situación que estamos viviendo es un poco difícil que a corto plazo esto o lo otro cuando las cosas no se están moviendo. A mediano plazo todavía no creo que tengamos una imagen de lo que va a ocurrir; me refiero por la situación con el coronavirus.

¿Qué enseñanzas le dejó ser entrenador de la UCR y seleccionador nacional?

Muchas enseñanzas en cuanto a liderazgo, y no quiero decir que con las experiencias que acumulé me convertí en un líder increíble, pero siempre aprendemos.

Con el tiempo vamos aprendiendo a interactuar con la gente, porque cuando estás en una posición de mando tienes que dirigir, liderar y efectivamente creo que me falta aprender mucho en esta parte; pero definitivamente salí conociendo más de este tema que cuando llegué y hay muchas cosas que si tuviera que hacerlas ahora las haría diferentes seguramente. Pero fue una gran experiencia de aprendizaje.

Puedo decir también que es difícil, cuando se tienen que tomar decisiones nunca vas a quedar bien con todo el mundo, y no lo digo como una queja, más bien me interesa como ayudar a la mayor cantidad de gente posible.

La experiencia que acumulé de alguna forma me está ayudando mucho ahora que doy ajedrez en escuelas y las cosas van saliendo muy bien, por dicha.

¿Cuánto disfruta ser seleccionado nacional?

Competir, representar al país. Cuando salgo a competir representando el país hay algo más que está haciendo no solo por usted, sino por la gente que quiere del país en el que vives y amas, para mí eso es importante y la prueba de ello es que cada vez que salgo a jugar por el país, los resultados, algunos podrán decir que pueden ser mejores o que fueron muy buenos, -lo que nadie puede cuestionar es que me lo tomo muy enserio-.

¿A qué se dedica Mauricio Arias fuera del ajedrez?

De momento no ha mucho. Antes de estar dedicado a tiempo completo al ajedrez, trabajaba en la parte de seguros, primero como el Instituto Costarricense de Seguros y luego como una comercializadora de seguros en la parte de los clientes ejecutivos. Fue una experiencia muy bonita, pero el mundo de los seguros también es muy duro, al menos eso me pareció en su momento y tiene cosas fantásticas también.

En algún momento se planteó la posibilidad de dedicarme nada más al ajedrez y la tomé, y de momento no me arrepiento, estoy muy contento.

¿Cómo resume la que ha sido su carrera como jugador y cuántos logros acumula?

Creo que ha sido una carrera buena, es decir, logré ser campeón nacional un par de veces, quisiera y ojalá ocurra que en algún momento se repita. Y aún si no se repite creo que es algo destacado.

He logrado representar al país varias veces con éxito, en algunas ocasiones tal vez no con tanto.

Lo de los logros es difícil. ¿Qué es un logro? Haber sido campeón estudiantil para algunos es un gran logro y no estoy diciendo que no lo sea. Haber sido campeón nacional también, para algunos es un gran logro, pero tenemos jugadores que lo han sido más de 10 veces. ¿Ser Maestro Internacional? Bueno, hay Grandes Maestros, que son jugadores que en algunos casos tienen 400 o 500 puntos de Elo más que mi persona; eso hace que no sea una carrera llena de logros, pero para mí lo es, porque me dio la oportunidad de estar en algo que me gusta, de dejar mi huella en la vida de varias personas que han aprendido conmigo y en ese sentido, mi logro más importante es haber dejado una huella en el ajedrez de nuestro país y en la formación de muchas personas.

¿Qué torneo lo ha marcado más?

Esta es una pregunta difícil, señalar un torneo y decir que ese fue el que más me marcó. Aunque podría mencionar uno: el primer torneo que jugué, tal vez es lo más cercano a un torneo en el que piense que me ha marcado, porque es un torneo en el que hice medio punto o un punto en 9 o 11 partidas, no lo recuerdo, fue un campeonato nacional de cadetes. Y digo que me marcó, porque, aunque no era tan consciente de lo mal jugador que era en ese momento, de alguna forma en mi cabeza todo era un accidente, y no causó que dejara de jugar, más bien haberlo jugado y salir con las mismas ganas en realidad fue muy importante. Si en ese torneo hago ese punto y pienso en lo mal jugador que era no estaría dando estas respuestas.

El otro torneo que me pudo haber marcado en el Panamericano Juvenil de Chile, allá por el 98, quedé de sexto lugar y considerando que en ese momento era un jugador de segunda división en el país, fue excelente y lo importante fue que me di cuenta de muchas de las carencias que tenía en mi juego, especialmente en la parte posicional, estrategia del juego y eso hizo que pusiera una cantidad grande de trabajo hizo que mi ajedrez en general mejorara.

¿Cómo se define fuera del ajedrez?

Una persona muy llevadera y una persona muy centrada, en general no tengo problemas, enemigos, pleitos, muy equilibrado gracias al ajedrez. Es muy difícil que algo me ponga muy arriba o muy abajo. Todos tenemos nuestros momentos, pero el ajedrez te enseña a competir, llevarse golpes y eso ha ayudado que tenga una forma de ser con la que estoy muy contento. Trato de hacer sentir bien a las personas que están alrededor mío. Y en ese aspecto estoy muy contento como las cosas han acabado uniéndose para que me convierta en la persona que soy. Y estoy feliz con las personas que tengo alrededor, son buenas personas y eso debe contar para algo.