PERSONAS NO VIDENTES O DE BAJA VISIÓN CON NUEVA OPORTUNIDAD PARA CRECER EN EL AJEDREZ
*Este domingo 18 de julio se inauguran las escuelas deportivas para esta población.
Por Rodrigo Murillo Arce
La población no vidente o de baja visión que gusta del ajedrez, tendrá una nueva oportunidad para desarrollarse en la disciplina, con la inauguración de las escuelas deportivas.
Este segundo semestre del año 2021 arranca el programa piloto impulsado por la Federación Central de Ajedrez de Costa Rica (FCACR), cuyo objetivo es ofrecer espacios para que los jugadores regulares puedan tener un mejor entrenamiento y a su vez, facilitar que nuevos integrantes de esta población conozcan del deporte ciencia y se animen a practicarlo con más regularidad.
En la primera etapa del proyecto las sedes son el Colegio New Hope en San Juan de Santa Bárbara de Heredia, el Salón de Aprendizaje de Ajedrez de Goicoechea y el Centro Cívico de Escazú. Los profesores a cargo son Paúl González, Gabriel Chaves y Francisco Hernández.
Cabe destacar, que los ajedrecistas no videntes cuentan desde hace varios años con una asociación adscrita a la FCACR, que organiza sus propios campeonatos y con muy buen suceso han representado al país en competencias internacionales.
“A lo largo del tiempo que tiene ADAES (Asociación Deportiva de Ajedrecistas Especiales) de estar buscando el masificar el deporte adaptado del ajedrez, estas escuelas serán un estandarte, ya que los ajedrecistas tendrán el acceso a entrenamiento de calidad y no ser un tema empírico y crecerá el nivel de juego de todos los atletas”, comentó Steven Méndez, presidente de ADAES.
Asegura que “nuestra expectativa es que un buen porcentaje de la población con discapacidad visual este jugando ajedrez”.
Para los instructores significa un reto contribuir en esa masificación que busca la población del ajedrez adaptado.
“ESTOY MUY EMOCIONADO”
Paúl González es el entrenador destacado en la sede del Colegio New Hope, está listo para iniciar con este proceso de enseñanza, que en parte es muy diferente al que está acostumbrado como profesor de la disciplina.
“El ajedrez, por sus características particulares, es un deporte que adaptando algunos detalles faculta la participación de las personas no videntes. He acumulado mucha experiencia enseñando a personas que pueden ver a imaginar el tablero y mover las piezas en sus mentes, lo que se conoce popularmente como ‘jugar a ciegas’; estoy muy emocionado con la posibilidad de aprender, trabajar y crear nuevas perspectivas al respecto de estos procesos, junto a mis colegas y a la población de ajedrecistas no videntes”.
Tiene claro que todo inicio no es sencillo, por lo que se enfoca como punto de partida en dar a conocer el proyecto y aumentar la cantidad de participantes.
“Este programa ofrece la oportunidad de que individuos ciegos o con discapacidad visual se relacionen con muchas otras personas en un ámbito recreativo, lo que favorece su desarrollo, incrementa su conexión con el mundo y posibilita la canalización de sus aportes. La elevación del rendimiento será algo a cargo del seleccionador nacional, de momento la meta es sensibilizar y elevar el número de participantes”.
Asimismo, destaca el deseo de que la FCACR se interese en promover la inclusión y genere oportunidades a jugadores y personas con esta condición de discapacidad.
“A diferencia de los jugadores con la capacidad de mirar el tablero, ellos (los no videntes) construyen una imagen mental a partir de lo táctil. Es sabido que, ante la carencia de algún sentido sensorial, la percepción por medio de los demás sentidos se ensancha, por lo que se esperaría que su abstracción y habilidad para imaginar sean sobresalientes”.
“UNA EXPERIENCIA NUEVA COMO ENTRENADOR”
Por su parte, Francisco Hernández, afirma que se ha preparado lo mejor posible para encarar “una experiencia nueva como entrenador”, enfocado en hacer un buen trabajo y aportar su granito de arena para la masificación de la disciplina adaptada.
“He estado estudiando si difiere mucho la metodología, pero siempre con la meta de mejorar en el ajedrez, que es lo que nos gusta”.
Apuntó que “estamos capacitándonos con videos, material y todo lo que conseguimos para la enseñanza en esta población”.
Hernández tiene claro que “es un reto distinto, pero muy contento con la oportunidad y espero aprender mucho”.
En su caso atendrá la sede del Centro Cívico de Escazú, por lo que se prepara para contribuir con el objetivo global del proyecto, pero también en lo persona tiene sus propias metas.
“Lo primero será conocer el grupo, ver aspectos individuales y grupales, y a partir de ahí vamos a plantear objetivos, siempre con la consigna de mejorar y aportar”.
Como cierre, dejó un mensaje para todas aquellas personas no videntes o de baja visión que no se han decidido a inscribirse en las escuelas deportivas.
“El ajedrez en mi experiencia siempre trae beneficios y si le tomamos el gusto puede ser parte integral de nuestra vida. Así que a disfrutar y aprender ajedrez”.
Los atletas tendrán dos horas presenciales los días domingos, siguiendo el protocolo aprobado por el Ministerio de Salud y un encuentro más en línea para reforzar lo visto en clase.
Este espacio que se abre es gracias al aporte económico del Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (ICODER), así como a los Comités Cantonales de Deporte y Recreación de Goicoechea y Escazú, y al Colegio New Hope.
Los interesados pueden comunicarse al teléfono 8567-3940 o al correo adaescr@gmail.com.